En el centro de este collar deslumbrante descansa una esmeralda de 8×5 mm, tallada con gracia en forma de pera. Como piedra del mes de mayo, la esmeralda simboliza la renovación, la esperanza y la armonía. Su vibrante tono verde, lleno de vida, aporta un toque de frescura y significado a esta joya única.
El engaste de bisel con respaldo abierto no solo enmarca la esmeralda con elegancia, sino que también permite que la luz se filtre a través de la gema, resaltando su brillo natural. Este colgante reversible no solo es una expresión de estilo, sino también una celebración de la conexión con la naturaleza y la renovación constante.
Con una longitud ajustable que varía entre 40 cm y 45 cm, este collar se adapta a las preferencias individuales, ofreciendo versatilidad para cada ocasión. La plata 925, con su brillo atemporal, complementa la exuberancia de la esmeralda, creando una joya que va más allá de la moda para convertirse en un símbolo de esperanza y armonía, perfecta para iluminar cualquier momento de la vida.